/ricerca/americalatina/search.shtml?any=
Muestra menos

Se hai scelto di non accettare i cookie di profilazione e tracciamento, puoi aderire all’abbonamento "Consentless" a un costo molto accessibile, oppure scegliere un altro abbonamento per accedere ad ANSA.it.

Ti invitiamo a leggere le Condizioni Generali di Servizio, la Cookie Policy e l'Informativa Privacy.

Puoi leggere tutti i titoli di ANSA.it
e 10 contenuti ogni 30 giorni
a €16,99/anno

  • Servizio equivalente a quello accessibile prestando il consenso ai cookie di profilazione pubblicitaria e tracciamento
  • Durata annuale (senza rinnovo automatico)
  • Un pop-up ti avvertirà che hai raggiunto i contenuti consentiti in 30 giorni (potrai continuare a vedere tutti i titoli del sito, ma per aprire altri contenuti dovrai attendere il successivo periodo di 30 giorni)
  • Pubblicità presente ma non profilata o gestibile mediante il pannello delle preferenze
  • Iscrizione alle Newsletter tematiche curate dalle redazioni ANSA.


Per accedere senza limiti a tutti i contenuti di ANSA.it

Scegli il piano di abbonamento più adatto alle tue esigenze.

Pizzaballa y el drama de Gaza

El Patriarca de Jerusalén destaca la importancia del perdón.

CIUDAD DEL VATICANO, 02 mayo 2024, 12:37

Redaccion ANSA

ANSACheck
"Una paz verdadera y duradera requerirá mucho tiempo, ahora debemos trabajar para un cese de hostilidades, un alto al fuego como primer paso hacia otras perspectivas políticas que aún están por construir", dice el cardenal Pierbattista Pizzaballa, patriarca latino de Jerusalén.
    Pizzaballa está en Roma para asumir su cargo cardenalicio, que ya había tenido que posponer debido al cierre del espacio aéreo causado por el reciente ataque de represalia iraní hace dos semanas, y para una lectio magistralis en la Pontificia Universidad Lateranense sobre el tema, muy actual y al mismo tiempo muy delicado, "Características y criterios para una pastoral de la paz".
    El cardenal insiste en tres pilares: "perdón, verdad y justicia", y subraya la necesidad de abordar el "dolor" que no debe convertirse solo en "rencor" y "rabia".
    Directrices esenciales para los líderes religiosos que, como él, están intentando el diálogo en horas que no dudó en calificar como "dramáticas" pero también de "esperanza". Pero advierte que la Santa Sede o cualquier otra entidad, como el propio Patriarcado, en esta etapa, "no deben" mediar directamente.
    "Se está hablando, se está trabajando", explica, "pero es muy difícil identificar caminos y perspectivas mientras el conflicto está en curso, hasta que esta situación no se detenga". Se necesitan, ante todo, "la liberación de los rehenes, por un lado, y la de al menos algunos prisioneros palestinos por el otro, y luego se verá".
    "El papel de la Santa Sede y no solo de la Santa Sede", agrega, "es crear espacios y contextos de facilitación, no es nuestro papel entrar en la mediación, especialmente en realidades tan complejas y problemáticas, pero crear los contextos, las condiciones previas para que esto pueda suceder".
    Sin embargo, presionado sobre la intervención en Rafah prometida por Netanyahu con cualquier resultado de las negociaciones en curso con Hamás, Pizzaballa se pronuncia apenas: "Digamos que estamos presentes, ahora no es el momento de entrar en detalles".
    La situación humanitaria sigue siendo extremadamente dramática. La comunidad católica de Gaza, por ejemplo, la que se refugió en las primeras horas del conflicto dentro del recinto de la iglesia de la Sagrada Familia, ahora se ha reducido a "462 personas" (eran alrededor de 500) mientras que "208 están en la iglesia ortodoxa".
    "Están mal", cuenta el nuevo cardenal, "pero son valientes, intentan resistir. Hay escasez de agua, medicamentos, todos han perdido sus hogares. Ahora también hay problemas de enfermedades, algunas monjas han contraído hepatitis debido al agua contaminada. La comida escasea y se compra principalmente en el mercado negro a precios exorbitantes, pero al menos algo hay. También acabamos de enviar ayuda".
    Pizzaballa habla de una situación bastante crítica también en la zona de Jenin, en Cisjordania: "Es una zona muy caliente, el primer problema después del 7 de octubre fue que se cancelaron muchos permisos de trabajo. Los hospitales están lejos, los puntos de control han aumentado, estamos creando oportunidades de empleo temporales, también allí por ahora se logra resistir. Hasta donde sabemos.
   

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA

Imperdibles

Compartir

O utilizza